sábado, 5 de febrero de 2011

Capítulo Cuatro MARÍA WOODWORTH-ETTER

Ministerio Evangelistico Shekinah
!Ahora veras si mi palabra se cumple o no,Num 3:23¡


Nacida en 1844, María Woodworth-Etter vivía en Lisbon, Ohio. Dios la llamó a predicar en un tiempo cuando la gente no creía que una mujer debería predicar. De hecho, en aquel tiempo las mujeres ni siquiera tenían el derecho a votar. Ella vio la muerte de sus hijos pequeños, uno por uno, hasta que decidió obedecer a Jesucristo e ir a predicar el Evangelio. Está documentado que ella tenía uno de los ministerios y unciones más poderosos - con sanidades asombrosas y milagros - de toda la historia de la iglesia.

Los reportes dicen que ella a veces venía a una ciudad, después de haber dormido en una carpa, y dentro de pocos días había unas 20'000 personas en sus reuniones. A veces, las personas que trabajaban en el campo dentro de un radio de cincuenta millas alrededor de sus reuniones, recibían visiones del cielo y del infierno, y caían al suelo bajo una convicción tremenda. Fue como una unción generalizada que descendía sobre la región entera. Se reportó que por varias calles alrededor de sus reuniones, la gente caía al suelo y se arrepentían.
Los siguientes extractos son del libro "Un diario de señales y tiempos", por Maria Woodworth-Etter:
"Una vez estuve orando por la salvación de los pecadores, y el Salvador me apareció en la cruz, y me habló; yo puse mi mano sobre su cuerpo magullado, y miré en su cara sonriente. En otra oportunidad estuve meditando acerca del amor de Dios al dar a Su único Hijo para que muriera por los pecadores, y acerca del hogar hermoso que El está preparando para aquellos que le aman, y me parecía que estaba flotando y llegando a la Ciudad Hermosa. ¡Oh, la vista gloriosa que vi, nunca puede expresarse con una lengua mortal!" (p.25)

"En toda mi enfermedad y dificultad, los ministros y la gente vinieron de las diferentes iglesias en la ciudad y tenían una reunión de oración en mi habitación. Ellos oraban en las iglesias por mi recuperación. Yo estaba dispuesta a morir y a dejar a mi hijita y mi hijito, sabiendo que Dios iba a proveer por ellos; pero la obra a la que Dios me estaba llamando surgió delante de mí. Todos estos años Dios me había estado preparando - y yo no estaba dispuesta. Me sentí como un gusano ante El. Prometí a Dios que si El iba a restaurar mi salud y prepararme y mostrarme la obra, yo iba a intentar a hacerlo. Y empecé a mejorar inmediatamente."

"Yo era muy tímida, y atada como con cadenas en un espíritu de temor al hombre. Cuando me paraba para testificar, yo temblaba como una hoja en el viento, y empezaba a buscar pretextos - ¡Oh Dios, manda a alguna otra persona! Entonces, en una visión el Señor me hizo ver el abismo sin fondo abierto en todo su horror y dolor. Allí había llanto y lamento y crujir de dientes. Estaba rodeado por una gran multitud de gente que parecía inconsciente del peligro, y sin advertencia iban a caer dentro de un momento a este lugar horroroso. Yo estaba por encima de la gente sobre una tabla estrecha que llevaba hasta el cielo; y yo estaba exhortando e instando a la gente a subir a esta tabla para escapar de aquel lugar terrible. Varios empezaron a venir. Había una hermosa luz resplandeciente encima de mí, y yo les animaba a seguir esta luz, y ellos se fueron directamente al cielo."

"En todas estas pruebas, Dios me estaba preparando y abriendo el camino para la gran batalla contra el enemigo de las almas, y ahora el gran deseo de mi corazón era trabajar para Jesús. Yo anhelaba ganar una estrella para la corona del Salvador. A veces cuando el Espíritu de Dios estaba disputando y llamando tan claramente, yo me rendía y decía: 'Sí, Señor, voy a ir.' La gloria del Señor venía sobre mí como una nube, y me sentía como transportada por cientas de millas y puesta en un campo de trigo, donde las espigas estaban cayendo todo alrededor de mí. Fui llenada con celo y poder, y sentí como si pudiera pararme ante el mundo entero y exhortar a los pecadores moribundos. Me parecía que tenía que dejar todo e ir al instante. Entonces satanás entraba como una inundación y decía: 'Bien bonita te verías predicando, un buen blanco para que todo el mundo se burlaría de ti. Tú sabes que no puedes hacerlo.' Entonces yo pensaba en mi debilidad y decía: 'No, por supuesto que no puedo hacerlo.' Entonces yo entraba en una oscuridad y desesperación. Deseaba escapar de Dios, o deseaba morir; pero cuando empezaba a ver las cosas de esta manera, que Dios sabía todo de mí y que El era capaz y dispuesto a calificarme para la obra, entonces yo le pedía calificarme para la obra. LE PEDÍ A ÉL CALIFICARME."

"Deseo que el lector comprenda que en aquel tiempo yo tenía una buena experienca, un corazón puro, estaba llena del amor de Dios, pero no era calificada para la obra de Dios. Yo sabía que no era nada sino un gusano. Dios quiso tener a un gusano para trillar una montaña. Entonces pedí a Dios que me diera el poder que les dio a los pescadores de Galilea - que me ungiera para el servicio. Vine como una niña pidiendo pan. Le busqué ... Dios no me decepcionó. El poder del Espíritu Santo bajó como una nube. Fue más brillante que el sol. Fui cubierta y envuelta por ella. Fui bautizada con el Espíritu Santo, y fuego, y poder, que nunca más me dejó. Fue como fuego líquido, y los ángeles estaban todo alrededor de mí en fuego y gloria."

"Pensé pasar por unos estudios y prepararme para la obra, pensando que el Señor haría que mi esposo y la gente estuvieran de alguna manera dispuestos a dejarme salir y hacer la obra. Pero no podía concentrar mi mente en los estudios. Todo parecía vacío y vano, y yo estaba inquieta e incómoda... El querido Salvador se paró a mi lado una noche en una visión y me habló de cara a cara, y me preguntó qué estaba yo haciendo en la tierra. Me sentí condenada y dije: 'Señor, voy a trabajar en Tu viña.' El Señor dijo: '¿Cuándo?', y yo respondí: 'Cuando esté preparada para la obra.' Entonces el Señor me dijo: '¿No sabes que mientras tú te preparas, las almas están pereciendo? Anda ahora, y yo estaré contigo.'"

"Le dije que yo no sabía hablar a la gente; yo no sabía qué decir, y ellos no me iban a escuchar. Jesús dijo: 'Tú puedes decir a la gente lo que el Señor ha hecho por tu alma; háblales de la gloria de Dios y del amor de Jesús. Diles a los pecadores que se arrepientan y que se preparen para la muerte y el juicio, y yo estaré contigo.' Yo seguía haciendo excusa tras excusa, y Jesús siempre respondía: 'Anda, y yo estaré contigo.'... Entonces Jesús dijo una vez más: 'Anda, y yo estaré contigo.' Yo lloré: 'Señor, iré. ¿Adónde debo ir?' Y Jesús dijo: 'Anda acá, anda allá, dondequiera que haya almas que perecen.' - Alabado sea Dios por Su maravillosa bondad al revelar Su palabra y Su voluntad de una manera tan maravillosa, a un tal pobre, débil gusano del polvo. Yo vi más en aquella visión de lo que podría haber aprendido en años de estudios duros. Alabado sea Su santo nombre. Yo vi que no debía depender de nada de lo que yo podía hacer, sino que tenía que buscarle a El por poder y sabiduría." (p.26-29)

martes, 1 de febrero de 2011

Grandes evangelistas de sanidad

Ministerio Evangelistico Shekinah
!Ahora veras si mi palabra se cumple o no.Num 3:23¡}
"Llenos del Espíritu"

Las palabras griegas para "SED LLENOS del Espíritu Santo" (Ef.5:18) deberían traducirse: "SED SIENDO LLENADOS del Espíritu Santo". En otras palabras, debemos buscar a Dios constantemente para que seamos más y más llenos de Su Santo Espíritu. Algunas personas creen que los cristianos recibimos una sola llenura del Espíritu de Dios durante toda nuestra vida. Estas personas quizás son sinceras, pero están SINCERAMENTE EQUIVOCADOS.
Este artículo es acerca de hombres y mujeres de Dios que no estaban satisfechos con una señal inicial de la gracia o presencia de Dios en sus vidas. Ellos tenían hambre por más, y en su desesperación por una cercanía más y más profunda con Dios, ellos vencieron toda barrera y superaron todo obstáculo para experimentar una medida cada vez más grande de la santa presencia y gloria de Dios; y para ganar una unción de una clase que raras veces se ha visto desde los días de los apóstoles.

Su hambre fue por MÁS DE JESÚS, y El no los decepcionó, aunque el camino fue a menudo estrecho y difícil. Fue un camino que pocos buscaban. Pero simplemente no era suficiente ser "bautizados en el Espíritu" y "hablar en lenguas". Ellos necesitaban SER INVESTIDOS CON EL PODER DE LO ALTO. Y ellos necesitaban ver a Dios glorificado en sus días, de la manera más profunda posible. Ellos no podían soportar seguir viviendo de la manera como siempre. ¿Donde estaba el poder, dónde estaba la gloria de los días apostólicos? Ellos se encargaron - y fueron impulsados en este camino por Dios mismo - de descubrirlo.

Y así, con ayunos y oración, con luchas agonizantes como Jacob la tenía con Dios, despojando sus vidas no solamente de sus pecados, sino de todos sus "CAMINOS" carnales y emocionales - los caminos del poder humano y de la fuerza humana -, ellos seguían luchando, hasta alcanzar la sala del trono de Dios. Y cuando llegaron allá, fueron hombres y mujeres verdaderamente quebrantados, verdaderamente con "manos puras y un corazón limpio". Y El los encontró allí de la manera más profunda. Dime, mi amigo, ¿tienes hambre y sed de más de Dios? ¿Es tu único deseo amarle con TODO tu corazón y TODA tu mente y TODA tu alma y TODAS tus fuerzas? ¿Y deseas verlo a El glorificado en la tierra a lo máximo posible? "Y me buscarán, y me encontrarán, CUANDO ME BUSQUEN CON TODO VUESTRO CORAZÓN" (Jer.29:13) .


SMITH WIGGLESWORTH

Smith Wigglesworth fue sin duda uno de los hombres de Dios más ungidos que vivieron en los tiempos recientes. El fue conocido como el "apóstol de la fe", y si alguien merece ser descrito como "lleno de fe y del Espíritu Santo", fue él. El vivía y caminaba continuamente en la presencia de Dios. Y los milagros que acompañaron su ministerio fueron de la clase que se ha visto raras veces desde los días de los apóstoles. Personas nacidos ciegos y sordos, mutilados, deformados por enfermedades, otros al umbral de la muerte con cáncer u otra enfermedad - todos fueron sanados por el poder de Dios. Aun muertos fueron resucitados.

Nacido en 1859 en pobreza, Smith Wigglesworth se convirtió por medio de los metodistas a la edad de ocho años. Ya entonces tenía hambre de Dios, y hambre de ver almas convertidas. El participaba en el coro de la iglesia episcopal local. "Cuando la mayoría de los niños en el coro tenían doce años, tenían que ser confirmados por el obispo. Yo no tenía doce años, sino entre nueve y diez, cuando el obispo puso sus manos sobre mí. Puedo recordar que cuando él me impuso sus manos, tuve una experiencia similar a la que tuve cuarenta años después cuando fui bautizado en el Espíritu Santo. Mi cuerpo entero se llenó de la conciencia de la presencia de Dios, una conciencia que permaneció conmigo por varios días. Después del servicio de confirmación, todos los otros niños estaban hablando groserías y peleándose, y yo me asombraba por lo que había hecho una diferencia entre ellos y yo." (Stanley Frodsham, "Smith Wigglesworth, Apóstol de fe", p.13. - La mayoría de las citas siguientes son del mismo libro.)
Más tarde, Wigglesworth fue bautizado por inmersión por los bautistas. Pero recordemos que todos sus años tempranos de ministerio y de buscar a Dios fueron mucho antes del avivamiento de la "Calle Azusa" y del movimiento pentecostal. Smith tenía hambre por Dios, y experimentó muchos nuevos niveles de unción bastante antes de experimentar el bautismo en el Espíritu Santo y el hablar en lenguas. El ya fue conocido por su ministerio de sanidad, y había visto a Dios moverse con gran poder, bastante tiempo antes de que se hablaba acerca de la nueva experiencia pentecostal. No como nosotros hoy que empezamos con el bautismo en el Espíritu como nuestra primera unción verdadera, para Smith esto fue la culminación de años de buscar a Dios, y por tanto fue mucho más cerca a una verdadera investidura con "poder de lo alto" como en el Nuevo Testamento.

Smith Wigglesworth dice: "Yo recibí la enseñanza Bíblica fundamental entre los Hermanos de Plymouth. Marché bajo la bandera de sangre y fuego del Ejército de la Salvación, y allí aprendí a ganar almas al aire libre. Recibí la segunda bendición de la santificación y un corazón puro bajo la enseñanza de Reader Harris y la Liga Pentecostal. Reclamé el don del Espíritu Santo por fe mientras esperaba por diez días ante el Señor.
Pero en Sunderland, en 1907, me arrodillé ante Dios y tuve una experiencia de Hechos 2:4..." (p.119) El describe esta experiencia así: "Ella (la señora Boddy, esposa de un ministro) puso sus manos sobre mí y después tuvo que salir de la habitación. El fuego cayó. Fue un tiempo maravilloso mientras yo estuve allí a solas con Dios. El me bañó en poder. Fue una conciencia de la limpieza por la sangre preciosa, y exclamé: '¡Limpio! ¡Limpio! ¡Limpio!' Fui llenado con el gozo de la conciencia de la limpieza. Me fue dada una visión en la que vi al Señor Jesucristo.
Contemplé la cruz vacía, y le vi a El exaltado a la diestra de Dios el Padre. Ya no pude hablar en inglés, pero empecé a alabarle en otras lenguas como el Espíritu de Dios me lo dio a pronunciar. Yo supe entonces, aunque yo había recibido unciones anteriormente, que ahora, por fin, yo había recibido el verdadero bautismo en el Espíritu Santo como ellos lo recibieron en el día de Pentecostés." (p.44)

Después de esta experiencia, nada pudo parar a Smith Wigglesworth. El era una llama para Dios, y el fuego cayó dondequiera que iba. El dijo: "Creo que los ministros de Dios deben ser llamas de fuego. Nada menos que llamas. Nada menos que instrumentos poderosos, con mensajes ardientes, con corazones llenos de amor.
Ellos tienen que tener una PROFUNDIDAD DE CONSAGRACIÓN, que Dios se haya encargado completamente de su cuerpo, y que existen únicamente para manifestar la gloria de Dios. Un bautismo en la muerte, en la que la persona es purificada y activada..." El tenía ciertamente una audacia, un atrevimiento, que raras veces se ha visto en la cristiandad en los tiempos modernos.
Fue común para él anunciar en sus reuniones: "Cada sermón que Cristo predicó fue precedido por un milagro ejemplar. Nosotros seguiremos Su ejemplo. La primera persona en este público grande que se ponga de pie, no importa cual sea su enfermedad, yo oraré por esta persona y Dios la librará." - Y la primera persona que se paraba, aunque era el mutilado más deformado, ¡se sanaba!

En otra ocasión típica, un hombre con dolor del estómago vino adelante por oración, y Wigglesworth, ordenando al dolor que se vaya, golpeó al hombre en el estómago de manera que retrocedió hasta la mitad del auditorio - ¡completamente sanado! Wigglesworth creía en ORDENAR a los enfermos a ser sanados en el nombre de Jesús. Su fe era una fe agresiva, santa. El era un hombre "violento", tomando terreno del enemigo con fuerza. Sin embargo, él era también un hombre de gran compasión, como también de gran autoridad. ¡El diablo ciertamente lo sentía cuando Smith Wiggleworth llegó a la ciudad!

Varias personas fueron literalmente resucitados de la muerte bajo el ministerio de Smith. Este es el relato de una ocasión: "Mi amigo dijo: 'Ella está muerta.' El tenía miedo. Yo nunca en mi vida había visto a un hombre con tanto miedo. '¿Qué puedo hacer?', preguntó. Pensarás que lo que hice fue absurdo, pero alcancé la cama y jalé a la mujer. La cargué a través de la habitación, la paré contra la pared y la mantuve parada, porque estaba completamente muerta. Miré su cara y dije: 'En el nombre de Jesús reprendo esta muerte.' - Desde la coronilla de su cabeza hasta la planta de sus pies, su cuerpo entero comenzó a temblar. 'En el nombre de Jesús te ordeno que camines', dije. Repetí: 'En el nombre de Jesús, en el nombre de Jesús, ¡camina!', y ella caminó." (p.59) Esta mujer no solamente fue resucitada de la muerte, sino fue también instantáneamente sanada de una enfermedad terrible. Empezó a testificar a la gente acerca de su experiencia de muerte y restauración. Se ha documentado que Smith Wigglesworth resucitó a un total de 23 personas durante los años de su ministerio.

Una vez que Smith esperaba en el paradero del bus, una mujer tenía un problema con su perrito que le había seguido y no quiso volver a casa. Primero ella intentó hablarle suavemente y pedirle que vaya a casa. Pero después de un tiempo de intentar esto en vano, la mujer de repente pisó fuertemente con su pie y dijo severamente: '¡Anda inmediatamente a casa!' El perro se fue inmediatamente, con la cola entre las patas. "Así es como hay que tratar al diablo", dijo Wigglesworth a voz alta para que todos los que esperaban allí lo pudieran oír. Y esta fue su actitud hacia el diablo, en cada momento. El literalmente viajó por el mundo entero en las décadas de 1920 y 1930, y miles fueron salvos y sanados en todo lugar adonde iba. A menudo llegaba a un lugar sin que se sabía y sin ser anunciado, pero dentro de pocos días se amontonaban miles para escucharlo, porque el poder de Dios que fue demostrado en sus reuniones era tan grande. Dios fue realmente glorificado en todo lugar donde él iba
.
El era un hombre que caminaba y vivía en la misma presencia de Dios. Sin embargo, en muchos aspectos era un hombre muy natural y común. Y nunca tenía miedo de emitir una reprensión extraña y severa. Su objetivo era estar en una comunión constante, ininterrumpida con el Padre.
En sus años tempranos había pasado horas y días buscando a Dios fervientemente; pero más tarde, "aunque su vida era una combinación de oración y alabanza incesante, y cada una de sus palabras y obras era un acto de adoración, sin embargo no era dado a períodos prolongados de ayuno y oración." (p.122) En lugar de ello, él había aprendido el secreto de estar en una comunión continua, íntima con Dios (a veces retirándose quietamente en sí mismo para este propósito), aun cuando estaba en medio de una multitud de gente. El caminaba por fe, y estaba "en el Espíritu" todo el tiempo. Este fue un secreto vital de su éxito. El dijo: "Hay dos lados de este bautismo: El primero es, tú posees el Espíritu; el segundo es que el Espíritu te posee a ti." (Vea "La vida de Smith Wigglesworth", por Jack Hywel-Davies.) El había contado el costo, y todo pertenecía a Dios. El era un hombre que realmente comprendía la AUTORIDAD PIADOSA, y CAMINABA en ella por la fe. El dijo: "'Sed llenos del Espíritu', o sea, sed ATESTADOS del Espíritu, tan repletos que no quede lugar para ninguna otra cosa." Esta fue la manera como él vivía. Lleno de audacia, lleno de atrevimiento, "lleno de fe y del Espíritu Santo."

En una ocasión, él recuerda: "Estuve viajando a Cardiff en el sur de Gales. Yo había estado mucho en oración durante el viaje. El vagón estaba lleno de gente de quienes yo sabía que no eran salvos, pero había tanta conversación y bromas que no pude decir ni una palabra a favor de mi Maestro. Cuando el tren se estaba acercando a la estación, me fui a lavar las manos, y cuando regresé, un hombre saltó sobre sus pies y dijo: 'Señor, usted me convence de pecado', y cayó sobre sus rodillas allí mismo. Pronto toda la gente en el vagón estaba exclamando de la misma manera. Ellos dijeron: '¿Quién es usted? ¿Qué es usted? Usted nos convence a todos de nuestro pecado.'..." (Stanley Frodsham, 'Smith Wigglesworth, apóstol de fe', p.80). Este episodio me hace recordar mucho a otro evangelista audaz, franco y ungido - Charles G.Finney, quien había descubierto después de un poderoso bautismo del Espíritu Santo unos años antes, que incluso unos comentarios pasajeros que él hacía, atravesaron el corazón de la gente con convicción del pecado. El fue uno de los predicadores de avivamiento más grandes de todos los tiempos. (Murió en 1875.)

Smith Wigglesworth puso un gran énfasis en pureza y santidad, como todos los verdaderos predicadores de avivamiento. El dijo: "Cada día tienes que llegar a un plano más alto. Tienes que negarte a ti mismo para progresar con Dios. Tienes que rechazar todo lo que no sea puro y santo. Dios quiere que seas puro en tu corazón. El quiere que tengas un deseo intenso de santidad... Son dos cosas que harán que saltes fuera de ti mismo y dentro de las promesas de Dios hoy. La una es la pureza, y la otra es la FE, que es avivada más y más POR LA PUREZA." (p.125) Esta declaración contiene probablemente el secreto clave del éxito extraordinario de Smith Wigglesworth en Dios. Y es obviamente una clave que nosotros también debemos recordar. Otro punto a recordar es que Smith estaba muy consciente de los peligros del dinero, y se cuidaba a sí mismo mucho contra cualquier avaricia. El era verdaderamente irreprochable también en esta área.

Yo creo que Smith Wigglesworth fue algo como un "precursor" directo de la clase de ministerios que se levantarán en nuestros días. Creo que los ministerios apostólicos que traerán avivamiento verdadero en estos últimos días, combinarán la fe atrevida que obra milagros, de un Smith Wigglesworth, con la prédica de arrepentimiento que convence en lo más profundo, de un Charles Finney. Y se moverán bajo una unción poderosa que combina lo mejor de ambos tipos de ministerio. ¡Qué días gloriosos serán estos! - Smith Wigglesworth murió en 1946 a la edad avanzada de 87 años, una llama de Dios hasta el final. Que él sea un ejemplo para nosotros todos.

domingo, 30 de enero de 2011

Capítulo Tres W.V.GRANT, padre

Ministerio Evangelistico Shekinah
Ahora veras si mi palabra se cumple o no. (Números 11:23)


Varios grandes evangelistas de sanidad fueron guiados por Dios a "ayunar y orar" durante períodos bastante largos para alcanzar las esferas más grandes de unción y comunión con Dios.
W.V.Grant, padre, un hombre muy ungido y grandemente usado por Dios durante el siglo pasado, fue uno de ellos. Antes de llegar a su plena unción de ministerio, él pasaba todo su tiempo libre con Jesús en el lugar secreto. El buscaba a Dios constantemente, y ayunaba los fines de semana. Leía muchos libros acerca de los siervos de Dios del pasado, y estudiaba su Biblia día y noche. Oraba varios días seguidos hasta recibir respuestas. No iba a salir de su cuarto de oración hasta recibir una respuesta de Dios. Esto, y la obra cristiana, fue su estilo de vida durante catorce años.

El ya había recibido el bautismo en el Espíritu Santo catorce años antes, y hablaba en lenguas. "Pero me sentía como un arco sin flechas, un carro sin batería, o una canoa sin remo. Yo leía como Pedro lo hizo, pero yo no podía hacerlo. Yo tenía el mapa de la ruta, estaba en la ruta correcta, pero por el lado equivocado." (W.V.Grant, 'Buscando lo sobrenatural', p.6). "Yo oraba alrededor del altar. Yo ayunaba tres días seguidos. Yo testificaba acerca de un Dios sobrenatural.
Yo les dije a la gente que yo tenía el Espíritu Santo. Yo hablaba en lenguas para demostrarlo. Pero todo el tiempo mi corazón clamaba: ¿Dónde están todos los milagros de los que habla la Biblia?" (p.2)

"Yo era director de 13 iglesias... Yo veía a personas llegar a ser salvos y ser llenos del Espíritu Santo con otras lenguas. Yo veía a unas pocas personas que se sanaron. Yo predicaba que teníamos el poder pentecostal. ¿Pero dónde estaban los resultados que había en la iglesia temprana después de Pentecostés? ... Yo leí unos 200 libros escritos por hombres piadosos. Yo leía cada palabra en la revista pentecostal durante años ... Después de ayunar tres días, me sentí tan vacío como antes. ¿No había manera de satisfacer este anhelo? ¿Quién estaba poniendo este anhelo y esta búsqueda en mi alma?" (p.3)

"¿Qué esperaba yo? Ninguna otra cosa me importaba. Yo quise ver Su gloria. Yo quise ver Sus milagros. Yo quise ver a los muertos resucitados, yo quise ver a los diablos expulsados. Yo quise ver a los sordos, ciegos y mudos restaurados. ¿No dijo Dios que en los últimos días los cojos saltarían como ciervos, la lengua de los mudos cantaría, y los ojos de los ciegos serían abiertos? (Isaías 35:5-6) ... Juan dijo en Lucas 3:16: 'El les bautizará con el Espíritu Santo y con FUEGO'... Fue catorce años después de recibir al Espíritu Santo y lenguas, que recibí al Espíritu Santo y poder." (p.13)
"Si Dios te ha llamado a un ministerio a tiempo completo de sanar a los enfermos y expulsar diablos, El normalmente te da tiempo para entregarte al ayuno y la oración... Entonces una noche, para mi sorpresa, el Señor me apareció y me dijo que debía ayunar siete días, y estuve dispuesto a hacerlo. Cuando el ayuno terminó, el Señor me apareció nuevamente. Oí a los ángeles cantar una canción que nunca había escuchado. La anoté. ¡Fue hermosa! Fue como el cielo.
Entonces un ángel justo encima de mi cabeza dijo estas palabras: 'En Mi nombre expulsarán diablos, pondrán manos sobre los enfermos y se sanarán.' Cuando comencé a comer, sentí algo como una corriente eléctrica correr por las puntas de mis dedos y por la planta de mis pies. ¡El fuego de Dios estaba en todo mi cuerpo!" (W.V.Grant, '¿Tengo que ayunar cuarenta días?', p.20, 36, 37).

"Pero el último día en la madrugada, el Espíritu Santo comenzó a hablarme. Marcos 16:17-18: 'Estas señales seguirán a los que creen: En Mi nombre expulsarán diablos, levantarán serpientes, si beben algo mortífero no les hará daño, pondrán manos sobre los enfermos y sanarán'... Me puse de pie y caminé, y mis pies estaban ardiendo como si estuvieran conectados a un cable de alta tensión. El Espíritu Santo y el fuego estaban corriendo por mi cuerpo entero desde la cabeza hasta los dedos de los pies. Parecía que todas mis fuerzas me habían abandonado, y la fuerza de Cristo había tomado su lugar. Durante varios años desde entonces, los diablos fueron expulsados y la gente fue sanada."

"Yo había tenido el Espíritu Santo durante años, pero parecía que ahora yo estaba no solamente lleno, sino bautizado con celo, compasión, y con la naturaleza divina de Jesús, con virtud, y con el fuego... Si sientes que el Señor te ha llamado a un ministerio especial de expulsar demonios, entonces recuerda: Hay muchas otras cosas que son igual de necesarias como el ayuno. El ayuno por sí mismo no será suficiente ... Pero cuando yo fui llamado a ayunar, fue igual de real como cuando fui llamado a predicar. Estuve consciente de que el ayuno fue la obra de Dios y no mi propia obra ... Ciertos hombres necesitan un ayuno más largo que otros, para llegar al lugar donde está lo suficientemente entregado al Señor para recibir ciertos dones en su vida. Yo necesitaba varios días de ayuno y de ser tan entregado al Señor; parecía que todas mis fuerzas abandonaron mi cuerpo, y la fuerza del Señor llegó en su lugar. Entonces sentí como la virtud y la naturaleza divina, y el fuego del Espíritu Santo moraban en mi cuerpo, lo que me dio poder para enfrentar a los diablos y expulsarlos.

Pero todavía necesito que el Señor me guíe cuándo y cómo hacerlo. No soy yo quien hago la obra, sino el Padre que vive en mí. Dios no te encomendará ningún ministerio si no conoces la dirección del Espíritu. He hablado personalmente con varios evangelistas que fueron llamados por Dios a un ministerio sobrenatural. Ninguno de ellos pasó cuarenta días sin comer. Puesto que Dios ha dado a otras personas ministerios de liberación sin un ayuno largo, puedes tener ánimo y fe por un ministerio sin ayunar cuarenta días..."

UNA LLENURA CRECIENTE DEL ESPÍRITU SANTO

En Hechos 2:1-4 llemos del tremendo derramamiento inicial del Espíritu Santo sobre 120 seguidores de Jesús en Pentecostés. Sin embargo, poco después leemos también de una reunión de creyentes en Jerusalén (ahora en un número de miles), donde oraron por audacia y por SEÑALES Y MILAGROS, para que Dios sea realmente glorificado (Hechos 4:29-30). Y leemos que "cuando habían orado, el lugar fue SACUDIDO donde estaban reunidos. Y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaron la palabra de Dios con audacia" (v.31). Ya había habido un derramamiento poderoso del Espíritu Santo, pero ahora recibieron otro, justo cuando más lo necesitaban, y ahora más que nunca, SEÑALES Y MILAGROS les siguieron dondequiera que iban.

Jesús dijo a Sus discípulos: "SANEN A LOS ENFERMOS, LIMPIEN A LOS LEPROSOS, RESUCITEN A LOS MUERTOS, EXPULSEN DIABLOS; libremente recibieron, libremente den" (Mat.10:7-8). Y El les dijo también: "Miren, les doy el poder de pisar serpientes y escorpiones, y SOBRE TODO PODER DEL ENEMIGO" (Luc.10:19). "El que cree en mí hará las mismas obras que yo hago; y hará OBRAS MAYORES QUE ESTAS." (Juan 14:12).

Como demuestran las Escrituras y la historia de los avivamientos, un hombre o una mujer de Dios a menudo tiene que pasar muchos años en un "desierto" de oscuridad ante de llegar verdaderamente a su ministerio. Esto será a menudo un lugar de esterilidad, "ESPERAR" y prepararse, donde tienen que vencer y perseverar - mientras son moldeados y entrenados por Dios -, si alguna vez quieren alcanzar su potencial en Dios con unción y poder "de lo alto".
Mientras otros se concentran en sus carreras profesionales, o se mantienen ocupados construyendo pequeños ministerios pulidos de la manera usual y predecible (con poca necesidad de Dios para tener éxito), estos hombres y mujeres de Dios son llamados a apartarse en el lugar secreto con Dios; y de allí surgirán quebrantados, pero llenos de fuego y de determinación, humillados pero nunca derribados. Siempre han sido muchos llamados, pero pocos escogidos.
Como escribió el apóstol Pablo: "Una cosa hago, olvidando las cosas que están atrás, y estirándome hacia las cosas que están por delante, PROSIGO a la meta, al PREMIO del SUPREMO LLAMAMIENTO DE DIOS EN CRISTO JESÚS." (Fil.3:13-14). A menudo Dios prepara a tales instrumentos durante muchos años, casi completamente escondidos, antes de soltarlos contra el mundo. Y entonces aparecen repentinamente, como de la nada, para traer gloria a su Dios, para derrotar al diablo en Su nombre, y para levantar Su estándar en la tierra una vez más. De tales 'esforzados hombres y mujeres de valor' nacen los verdaderos avivamientos.
Bendito eres Dios,porque grande es tu misericordia y grandes son tus maravillas.